Practicar deporte y hacer actividad física es uno de los pilares para poder mantener hábitos de vida saludables. El fútbol (ya sea profesional o recreativo) es uno de los deportes más populares de todo el país, tanto en la cantidad de público que lo ve, como en el número de personas que lo practican.  

Como cualquier actividad física, debes saber que su práctica tiene ciertos riesgos, relacionados a daños musculares o golpes que podrías recibir mientras estás haciendo ejercicio.  

 

En el siguiente artículo te contamos un poco sobre las lesiones más comunes en el fútbol y algunas precauciones que puedes tomar para prevenirlas

 

Lesiones en el fútbol: ¿Cuáles son las más comunes? 

Si eres alguien que sigue y ve fútbol constantemente, sabrás que las lesiones son algo común en todos los equipos de todas las ligas profesionales. Sin ir más lejos, algunas estadísticas dicen que los equipos profesionales pueden sufrir una media de 50 lesiones por temporada. 

Lo primero que debes saber es que las lesiones se pueden dividir en tres tipos, según el tipo de tejido que afecten: musculares, óseas y tendinosas. 

 1. Lesiones musculares

Son aquellas ocasionadas por golpes, contusiones o sobrecargas, pero siempre asociadas a daño en los músculos. Si bien pueden ocurrir en cualquier músculo del cuerpo, cuando hablamos de lesiones en el fútbol, las asociamos a músculos de las piernas.  
 
Algunas de las más comunes son: 

 

Desgarros musculares 

El desgarro muscular es una de las lesiones más comunes entre los practicantes de cualquier tipo de deporte. Consiste en la rotura de una fibra muscular que provoca la pérdida de continuidad del músculo.  

Ocurre más seguido en muslos, isquiotibiales y cuádriceps, y generalmente se asocian a una mala preparación física o a un mal calentamiento y elongación antes del deporte.  

El desgarro muscular se puede calificar en tres grados dependiendo del tamaño de la rotura muscular: leve, moderado y severo.  


Fuente: Clínica Meds 

 

Dependiendo el tipo de desgarro que se ha producido, el tiempo de recuperación puede variar desde 10 días a 3 meses.  

 

Contracturas musculares 

Una contractura muscular es, como su nombre nos dice, una contracción involuntaria y persistente del músculo, lo que genera una tensión no natural en el músculo afectado.  

Es un tipo de lesión muy común que puede ocurrir por diversos factores, pero, en la práctica deportiva, su principal causante es el sobreesfuerzo que se genera en un músculo en específico. 

 

     2. Lesiones óseas

Las lesiones óseas son causadas generalmente por golpes, y significan un daño en los huesos de la persona afectada.  

En general son lesiones dolorosas y de importante tiempo de recuperación, te contamos algo sobre las más comunes: 

 

Fracturas 

Una fractura es una rotura total o parcial de algún hueso, se producen cuando se aplica más fuerza a un hueso de la que puede tolerar, en general por golpes o caídas.  

Las fracturas se clasifican en abiertas o cerradas, dependiendo de si el daño en el hueso queda expuesto a simple vista atravesando la piel o no. La forma de diagnosticar una fractura es mediante una radiografía

En caso de sufrir una fractura debes buscar atención médica rápidamente, pues es muy probable que necesites tratamientos de yeso o férulas para tu recuperación.  

El proceso de recuperación para una fractura es extenso, y en general puede variar de 4 a 6 meses.   

 

Luxaciones 

Una luxación es una lesión que se produce cuando dos extremos de hueso conectados entre sí sufren una separación. Ocurre cuando se fuerza demasiado un ligamento, dañando la articulación que une dos huesos.  

Las luxaciones vienen acompañadas de dolor en la zona de la lesión, pero para su diagnóstico requieren de exámenes como radiografías o imágenes de resonancia magnética. 

Su tratamiento en general incluye reposo, hielo, compresión y limitación de actividades físicas en la zona afectada. Sin embargo, debe ser un especialista quién entregue las indicaciones particulares para su tratamiento.  

 

      3. Lesiones tendinosas 

Las lesiones tendinosas son aquellas que ocurren con un sobreesfuerzo que genera roturas en las fibras de alguno de los tendones del cuerpo. 

Son lesiones muy comunes en la práctica deportiva debido al constante esfuerzo físico que realizan los atletas. No son lesiones riesgosas siempre y cuando se cumpla con el tratamiento recomendado. 

Las lesiones tendinosas leves son catalogadas como un tipo de tendinitis, y en general solo requieren reposo y fisioterapia para su recuperación.  

Por otro lado, la peor versión de una lesión tendinosa es una rotura de ligamentos, una compleja lesión con un alto tiempo de recuperación y que necesita una cirugía reconstructiva para su recuperación.  

Cómo prevenir lesiones en el fútbol: 4 recomendaciones 

Ahora que ya conoces alguna de las lesiones más comunes a las que te podrías enfrentar, te compartimos distintas recomendaciones que pueden ayudarte a prevenir sufrir alguna lesión durante tu práctica deportiva. 

 

1. Calentamiento adecuado 

Tu sistema muscular y nervioso debe prepararse para realizar actividad física. El calentamiento en general se compone de dos etapas, primero una de realizar ejercicios previos a tu actividad deportiva, y la otra de hacer elongaciones para terminar de preparar tus músculos.   

 

2. Buena condición física 

Es importante que conozcas tus propios límites. Por ejemplo, no deberías proponerte jugar un partido de fútbol completo de 90 minutos si no tienes una condición física previa que te permita este tipo de exigencia. 

Lo mejor es mantener hábitos de vida saludable constantemente, lo que te permitirá llegar a tu máximo potencial físico y deportivo.  

 

3. Conocimiento del campo de juego

Antes de jugar tu partido de fútbol (o cualquier otro deporte) es recomendable que hagas un recorrido por el campo de juego, así podrás identificar cualquier elemento peligroso como agujeros en el piso o piedras. 

Si es posible trata de jugar en un lugar limpio, la acumulación de tierra o polvo puede generar superficies extremadamente resbaladizas que pueden generar lesiones a ti o tus compañeros.  

 

4. Usa el equipo adecuado para tu deporte 

Cada deporte tiene su tipo de ropa ideal para practicarlo, esto no es solo una decisión estética, sino que la ropa deportiva tiene características que te ayudarán a protegerte durante tu actividad. 

Por ejemplo, si vas a jugar un partido de fútbol, es importante que cuentes con canilleras para protegerte de golpes, como también tengas las zapatillas adecuadas que te entreguen el agarre necesario para prevenir sufrir caídas.  

 

En caso de que te lesiones, no entres en pánico 

Debes tener presente que, a pesar de estos consejos o de cualquier tipo de preparación física que puedas realizar, las lesiones son un accidente que puede seguir ocurriendo. 

Lo importante es que, gracias al avance de los tratamientos deportivos, incluso las lesiones más severas como fracturas o rotura de ligamentos, pueden tener una excelente recuperación que te permita volver a practicar tu deporte favorito. 

Lo crucial es asistir oportunamente al médico y seguir su tratamiento y recomendaciones. Para cualquier lesión deportiva que puedas tener, BICE VIDA te ofrece nuestro Seguro Complementario de Salud Individual que te ayudará a mejorar tu cobertura en gastos médicos, ya que incluye atención médica de urgencia y reembolso en medicamentos ambulatorios con receta médica.